En esta entrada te contaremos todo acerca la vida en otros planetas y la evidencia extraterrestre de acuerdo a afirmaciones científicas.
¿Todavía sigues dudando de la existencia de vida en otros planetas?
Bueno, para todos los escépticos te hemos preparado un especial científico, donde te contaremos que hace la ciencia con respecto a la búsqueda de vida inteligente extraterrestre.
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.1
Los extremófilos son microorganismos capaces de vivir en condiciones extremas.
Estos organismos habitan en ambientes tan hostiles que hace tan sólo unos años se ha desarrollado el interés por su estudio.
Anteriormente se creía que la vida en estas condiciones era prácticamente imposible.
En la astrobiología, el estudio de los extremófilos tiene gran importancia, pues los científicos han descubierto que algunos de estos organismos reúnen las condiciones necesarias como para poder sobrevivir en determinados ambientes extraterrestres.
Se han encontrado formas de vida tan variadas en lugares tan extremos como en la Antártida, donde se creía que las temperaturas bajo cero impedían la posibilidad de albergar vida.
También se ha encontrado microorganismos en los cráteres de volcanes activos, allí donde la temperatura es tan extraordinariamente alta, al igual que su acidez.
Esto nos lleva a pensar, si existen estos organismos aquí en la Tierra en esas condiciones;
¿Por qué no pensar que también existen en otros rincones del universo?
Hace un tiempo un impactante anuncio de la Royal Astronomical Society volvió a poner sobre el tapete una hipótesis planteada hace años en la revista Nature por Carl Sagan que menciona que:
“Las nubes de nuestro vecino cercano, Venus, podrían albergar alguna forma de vida”
Investigadores de las universidades de Cardiff, Manchester, Cambridge y del Instituto Tecnológico de Massachusetts, detectaron un gas llamado “fosfina” o “fosfano” a unos 60 km de altura sobre la superficie del segundo planeta de nuestro sistema solar.
La fosfina se cree que se forma naturalmente por la degradación de materia orgánica.
Aunque es difícil encontrar evidencia concluyente de que el gas fue generado por microbios, hay varias cosas interesantes.
A esa altura la temperatura es propicia para la vida y los científicos descartaron otras fuentes, como relámpagos en la atmósfera o vulcanismo.
Por otro lado, ese gas en una atmósfera como la de Venus debería oxidarse rápidamente y desaparecer.
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Tendría que haber algo que lo esté produciendo, la pregunta es si es algo con vida.
Siempre se pensó que las posibilidades de encontrar vida en Venus son remotas ya que, las temperaturas son capaces de derretir el plomo, la presión atmosférica es 90 veces superior a la de nuestro planeta y sus nubes son de ácido sulfúrico.
Aunque durante dos mil millones de años el planeta tuvo una temperatura agradable y hasta tuvo océanos, en la actualidad su atmósfera densa en dióxido de carbono creó un efecto invernadero extremo que eleva las temperaturas hasta los 450 grados centígrados.
Pero a varios kilómetros de altura, en su cubierta nubosa permanente, se mantiene en alrededor de 30º C y es en ese ambiente no tan hostil el que los científicos piensan que podrían vivir estos llamados “extremófilos”.
¿No crees que, si existen este tipo de vida en nuestro propio planeta, existirá vida tal vez no inteligente, pero si microbiana en otros planetas?
Si es así entonces, se podría decir que si existe vida extraterrestre.
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.2
Si bien la búsqueda de vida extraterrestre es algo prioritario en las agendas de varios institutos científicos.
La búsqueda de planetas potencialmente habitables para los seres humanos también es una realidad que va más allá de las películas de ciencia ficción.
Un equipo de investigadores alemanes y estadounidenses descubrió un exoplaneta potencialmente habitable y su estrella anfitriona.
Son una imagen similar a la de la Tierra y el Sol, según comunicó el para la investigación del sistema solar.
El exoplaneta KOI-456.04 tiene menos del doble del tamaño de la Tierra y orbita a unos 3.000 años luz de nuestro sistema solar.
Este exoplaneta gira en torno a Kepler-160, una estrella parecida al Sol.
Según explicaron los científicos, este planeta se encuentra en una región de la zona estelar habitable.
El investigador principal, René Heller afirmó que el KOI-456.01 es relativamente grande comparado con muchos otros planetas considerados potencialmente habitables.
Pero es la combinación de este tamaño y su estrella de tipo solar lo que lo hace tan especial.
Además, la cantidad de luz que recibe el planeta de su estrella anfitriona es alrededor del 93% de la luz solar recibida en la Tierra.
Según el estudio publicado por la revista Astronomy and Astrophysics, si el KOI-456.04 tiene una atmósfera mayormente inerte con un leve efecto invernadero similar al de la Tierra, entonces su temperatura superficial sería de 5 ºC en promedio.
Lo que es unos 10 grados menor que la temperatura global promedio de la Tierra.
¿Se tratará efectivamente de un gemelo de la Tierra que pueda albergar vida tal como la conocemos?
Como te estas dando cuenta la Tierra no es un lugar tan especial como parece, porque como vemos también existen otras tierras en nuestro inmenso universo.
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.3
Por lo que la probabilidad de vida extraterrestre inteligente según la ecuación de Drake y los nuevos hallazgos y de los que iremos encontrando dentro de los próximos años, apunta que a que es más que obvio.
Un artículo, publicado en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, afirma que encontrar galaxias que alberguen vida extraterrestre, es posible.
El astrónomo Hongying Chen, de la Universidad de Leiden, junto a Michael Garret, han rastreado el cielo buscando extraterrestres hiper-avanzados, que pertenezcan a la categoría Kardashov Tipo III.
De 21 galaxias estudiadas, dos presentan valores atípicos.
La escala Kardashov se utiliza para juzgar la inteligencia de una civilización alienígena a partir de la cantidad de energía que utiliza, esta fue desarrollada en el año 1964 por el astrónomo soviético Nikolai Kardashov.
Para que podamos hacernos una idea, los humanos con suerte llegamos a alcanzar el Tipo I (nos encontramos en 0,73).
Lo que significa que nuestra civilización puede usar y almacenar la energía del planeta a medias.
Todavía nos falta aprovechar por completo la energía solar que llega a la Tierra, por lo tanto, los investigadores consideran que todavía nos faltan entre 100 y 200 años para ser capaces de alcanzar en su totalidad el Tipo I.
El Tipo II representa a aquellas civilizaciones que pueden utilizar la energía que proviene de una estrella y el Tipo III a las que pueden hacer uso de toda la energía que posee una galaxia.
Esto solo sería posible mediante el uso de una hipotética esfera de Dyson, una mega estructura que se encargarían de rodear una estrella y recoger toda la energía que produce.
Según Chen, las civilizaciones Tipo III tienen, requisitos de energía que probablemente generarán un fuerte exceso de emisión en el infrarrojo medio, que está asociado con el calor residual que generan.
Esto es lo que ha llevado a que dos galaxias, sean el objetivo principal de los investigadores, estos han explicado que en ambas se ha identificado un claro aumento en las emisiones de infrarrojo medio.
Que es el nombre que se da habitualmente en astronomía a un rango del espectro electromagnético.
¿Qué crees que este sucediendo allí? ¿Acaso podría ser vida alienígena?
¿Y si es así nos contaran la verdad si lo comprueban?
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.4
ORIGEN EXTRATERRESTRE DE LOS UAPS.
Mucho se viene hablando en los últimos tiempos de los ovnis o como se conocen ahora UAPS, estos fenómenos aéreos no identificados fueron objeto de estudio por las agencias gubernamentales de varios países, pero se volvió más notorio al presentarse un informe por parte del Pentágono en el senado.
El informe, elaborado a raíz de innumerables avistamientos inexplicables por parte de la Marina Norteamericana y demás fuerzas militares.
Estos informes muestran los encuentros de militares con objetos extraños que parecen desafiar las leyes de la física y no aparecen en los radares.
Ahora un nuevo informe admite que gran parte de los fenómenos observados sigue siendo difícil de explicar, incluida su aceleración, así como su capacidad para cambiar de dirección y sumergirse.
Si bien los funcionarios de inteligencia estadounidenses no han encontrado evidencia de que los fenómenos aéreos presenciados por los pilotos de la Marina en los últimos años sean naves de origen extraterrestre.
Ellos tampoco pueden explicar los movimientos inusuales que han desconcertado a los científicos y al ejército.
El informe determina que los 144 incidentes en las últimas dos décadas no tienen nada que ver con el ejército estadounidense ni con ninguna otra tecnología avanzada del gobierno, lo que elimina las posibilidades que se trate de naves experimentales secretas.
En el informe final presentado el último 25 de junio el gobierno no descartó que se trate de tecnología extraterrestre, ya que ninguno de los avistamientos pudo ser explicado.
¿Si han desconcertado a los científicos y al ejército, entonces que son objetos voladores no identificados? ¿Tu, que crees?
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.5
Un nuevo estudio publicado en la revista “Nature Communications” abre la posibilidad a la búsqueda de planetas similares a la Tierra en Alfa Centauri, el sistema estelar más próximo a nuestro Sol.
Alfa Centauri es el sistema estelar más cercano, está compuesto de tres estrellas.
Por un lado, Alfa Centauri A, B y C, esta ultima una enana roja que órbita alrededor de las otras dos.
Pues bien, en 2016 los científicos descubrieron un planeta de un tamaño similar a la Tierra que rodeaba Próxima Centauri, como también se conoce a Alfa Centauri C.
El planeta en cuestión, bautizado como Próxima B, se encontraba en lo que denomina zona de habitabilidad, es decir, a una distancia suficiente de su estrella para que pueda existir agua líquida.
El estudio corresponde al proyecto NEAR, liderado por el Observatorio Europeo Austral, y por el proyecto Breakthrough Watch, centrado en la búsqueda de exoplanetas con características similares a la Tierra.
El objetivo era rastrear las zonas de habitabilidad de Alfa Centauri A y B, para lo que se han utilizado un sistema de cuatro telescopios del Observatorio Paranal, en el desierto de Atacama.
Gracias a los datos recopilados por NEAR durante los meses de mayo y junio de 2019.
Los investigadores han podido rastrear la huella térmica de la zona de habitabilidad de Alfa Centauri A, donde han encontrado una señal que podría corresponderse con un planeta del tamaño aproximado de Neptuno orbitando a una distancia de entre 1 y 2 unidades astronómicas.
Es decir, en un rango de entre unos 150 y 300 millones de kilómetros.
Se espera que el rastro detectado anime a otros astrónomos a estudiar con más detalle el sistema de Alfa Centauri, nuestro vecino en el espacio.
Entre otras cosas porque, de confirmarse que efectivamente existe un planeta potencialmente habitable, puede que no sea el único.
Y quizás otros planetas similares a este, podamos encontrar vida extraterrestre ¿no crees?
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.6
El origen de la vida en Tierra es uno de esos enigmas fascinantes que ha desvelado a muchos científicos a lo largo de la historia y que quizás nunca tengamos una respuesta.
Sin embargo, en la comunidad científica hay cierto consenso acerca de establecer que la vida en nuestro planeta habría comenzado hace al menos 3 800 millones de años en los océanos.
Una de las teorías más aceptadas sobre el origen de la misma es que en la Tierra primitiva se daban las condiciones más adecuadas para que se sintetizaran las primeras moléculas orgánicas.
Cuyo nivel de complejidad habría aumentado progresivamente hasta formar otras más complejas como el ADN.
Existe, sin embargo, otra hipótesis alternativa a la del origen de la vida, y es la teoría de la panspermia, la cual postula que la vida habría surgido fuera de nuestro planeta, precisamente habría venido del espacio exterior.
En los últimos años se han ido acumulando evidencias que muestran que no sería tan complicado que ciertas moléculas orgánicas que son fundamentales para la vida se han formado más allá de nuestro plantea y han llegado a la Tierra a través de meteoritos.
Se dice que uno de los primeros de hablar de panspermia fue el científico griego Anaxágoras en el siglo V a.C.
El cual ya hablaba de que la vida se habría dispersado por todo el universo en forma de semillas.
A principios de siglo XX, el químico sueco premio nobel Svanté Arrhenius propuso que las esporas bacterianas resistentes eran impulsadas por viento solar de una estrella a otra.
Arrhenius llegó a calcular, incluso, el tiempo que tardaría una espora terrestre en alcanzar Plutón: que sería cuatro meses.
Además, dicha espora llegaría a Alfa Centauri en tan solo 7,000 años.
Por lo tanto, es muy factible que la vida se haya desarrollado en varios rincones del universo.
Luego la evolución habría hecho su trabajo y si bien esta teoría no explica el origen de la vida en sí, nos da la posibilidad de pensar que como ocurrió aquí podría haber ocurrido en otro lugar.
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.7
La edición digital del Washington Post publicó una entrevista en streaming con el nuevo administrador de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como NASA.
Tras desempeñar el cargo de senador de los Estados Unidos por Florida, entre 2001 y 2019, Bill Nelson fue nombrado administrador de la NASA a principios de mayo de 2021.
Cuando el asunto de los UAP (Fenómenos Aéreos no Identificados, por sus siglas en inglés) estaba en su punto más candente por la inminente desclasificación del informe sobre ovnis en el Congreso de los Estados Unidos.
En la entrevista, dijo que la NASA está observando muy de cerca las lunas de los planetas del sistema solar que se cree poseen océanos ya que podrían albergar vida.
“Hay lunas de otros planetas en las que creemos que hay océanos. Si hay océanos –siguió en su razonamiento–, es muy probable que haya vida. Así que estamos estudiando esa posibilidad de forma muy, muy agresiva” –declaró.
Nelson se refirió también a la instalación, prevista para finales de octubre de 2021, del nuevo telescopio espacial Webb, que está llamado a revolucionar nuestra idea del universo.
Este observatorio, que será puesto en órbita desde un cohete Ariane 5, detectará la luz de la primera generación de estrellas y galaxias que se formaron en el universo temprano y estudiará la atmósfera de exoplanetas habitables.
También Nelson no descarta que los UAP puedan ser de procedencia extraterrestre, durante una entrevista en CNN, declaró que si bien no creía que los ovnis fueran evidencia de naves extraterrestres visitando la Tierra reconoció que sería prematuro descartar esa posibilidad.
La ambigüedad de sus declaraciones se entiende mejor tras conocer que el grupo de trabajo de los UAP, el llamado UAP Task Force, consultó a la NASA acerca de este fenómeno tan misterioso.
Nelson también afirmo que, si recibimos algún tipo de mensaje de vida inteligente, va a sugerir que sus científicos intenten ponerse en contacto con ella.
¿A qué se deben tales declaraciones? ¿solo puras especulaciones, o es que la NASA sabe algo más?
Vida en otros planetas evidencia extraterrestre no.8
Abraham “Avi” Loeb, un físico investigador de Harvard que ha llevado a cabo investigaciones pioneras sobre los agujeros negros, los estallidos de rayos gamma, el universo primitivo y otras cuestiones propias de su campo.
Pero, desde hace más de diez años, también se ocupa de un asunto más controvertido: la vida extraterrestre y cómo encontrarla.
Hasta hace relativamente poco, el trabajo más importante de Loeb era su participación en el proyecto Breakthrough Starshot.
Este proyecto constaba en enviar “velas solares” que son naves espaciales ultrafinas y reflectantes, aceleradas por láseres a grandes velocidades hasta estrellas cercanas.
Pero eso cambio a finales de 2017, cuando los astrónomos de todo el mundo comenzaron a estudiar un enigmático visitante interestelar, que apareció en sus telescopios.
Los descubridores del objeto lo bautizaron Oumuamua, un término hawaiano que significa “explorador”.
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¿Qué llevo a pensar que se trataba de un objeto fuera de lo común?
Los exámenes que se hicieron revelaron que varias de sus propiedades no admitían una explicación natural.
La forma, extremadamente alargada y aplanada, y con un tamaño de cientos de metros no se parecía a la de ningún asteroide o cometa conocido.
Y lo mismo ocurría con su brillo, el cual resultó ser al menos diez veces más reflectante que las típicas rocas espaciales de nuestro sistema solar; tanto que parecía un objeto metálico.
Y lo más extraño era que, mientras se alejaba del Sol, ‘Oumuamua mostró una aceleración que no podía explicarse a partir de la interacción gravitatoria con nuestra estrella y los demás cuerpos del sistema solar.
Para Loeb, la explicación más viable era tan obvia como sensacional: su forma aplanada y a su alta reflectividad, la aceleración anómala de ‘Oumuamua tenía sentido si el objeto era una vela solar, tal vez una reliquia de alguna civilización intergaláctica desaparecida.
A finales de 2018, Avi Loeb y Shmuel Bialy, publicaron un artículo en The Astrophysical Journal Letters donde sostenían que ‘Oumuamua había sido nada menos que el primer contacto de la humanidad con un artefacto creado por una civilización extraterrestre.
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El Proyecto “Moon Dust” fue una operación para recuperar objetos y escombros de vehículos espaciales que habían sobrevivido al reingreso del espacio a la Tierra.
Sin embargo, ha habido muchos rumores sobre el proyecto que lo conectan con el fenómeno OVNI.
Oficialmente, era un proyecto de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos que se llevó a cabo en secreto con la colaboración con la Agencia Espacial Canadiense.
Supuestamente tenía la misión de estudiar los efectos del polvo lunar en la óptica y la mecánica de las naves espaciales para desarrollar soluciones innovadoras que permitieran prolongar su vida operativa dentro de un entorno lunar o incluso marciano.
Sin embargo, en el contexto de la Guerra Fría, este proyecto perseguía el objetivo de explotar el hardware de las misiones espaciales soviéticas.
Es decir, que Moon Dust se convirtió en un “recuperador de satélites”.
Luego se supo que gracias a la ley de libertad de información se desclasificaron archivos donde se vincula el proyecto a los ovnis.
En efecto, algunos documentos procedentes principalmente de la Agencia Defensa de Inteligencia (DIA) y el Departamento de Estado, hacen referencia al nombre en clave al que está asociado el fenómeno ovni.
A finales de la década de los 70, Robert Todd, un conocido investigador obtuvo varios documentos en los que queda bastante claro que la gran mayoría de las recuperaciones de Moon Dust eran de tecnología terrestre.
Sin embargo, se mencionaba la operación Blue Fly y proyecto UFO quienes estarían detrás de la recuperación de restos y naves, pero de origen desconocido.
A mediados de la década de 1960, el proyecto todavía recibía informes interesantes.
Aparentemente, el primero recuperaba los objetos y los segundos investigaban los fenómenos aéreos inexplicables y los restos obtenidos.
De hecho, ambos proyectos se relacionan con el incidente Roswell como así también con la recuperación del Caballero Negro.
Este supuesto satélite alienígena que orbitaba la Tierra, que muchos afirman que el gobierno norteamericano derribó para su estudio.
¿Será posible que ocurra una desclasificación masiva de los archivos relacionados con ovnis?
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DEFIENDEN LA BÚSQUEDA EXTRATERRESTRE.
El director de uno de los observatorios nacionales más importantes de Estados Unidos afirmo recientemente que la búsqueda de vida inteligente en otras partes del universo debe tomarse más en serio.
Anthony Beasley dijo en un reportaje de la BBC, que los gobiernos deberían haber apoyar más ese campo de investigación.
Solo ha sido rechazado durante décadas por quienes financian proyectos gubernamentales.
Su respaldo a la búsqueda de inteligencia extraterrestre, SETI por sus siglas en inglés, marcó un cambio radical en las actitudes hacia un campo considerado hasta hace muy poco como ciencia marginal.
Beasley hizo estos comentarios en una reunión de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia en Seattle.
Allí dijo que ha llegado la hora de que SETI salga de la sombra y se integre a todas las demás áreas de la astronomía.
Existen numerosos proyectos SETI, que tratan de encontrar vida extraterrestre inteligente, ya sea por medio del análisis de señales electromagnéticas capturadas en distintos radiotelescopios.
O bien enviando mensajes de distinta naturaleza al espacio con la esperanza de que alguno de ellos sea contestado.
Hasta la fecha no se ha detectado ninguna señal de claro origen extraterrestre, sin tener en cuenta a la Señal Wow, que todavía está en estudio.
Los primeros proyectos SETI surgieron bajo el patrocinio de la NASA durante los años fue SETI at Home, fue apoyado por millones de personas de todo el mundo mediante el uso de sus computadoras personales, que procesaban la información capturada por el radiotelescopio de Arecibo, Puerto Rico.
La novedad más reciente relacionada con los proyectos SETI es la Señal BLC1, una señal de radio que aparentemente provendría de Próxima Centauri, como hemos hablado anteriormente.