Hoy te contaremos sobre una de la tragedia de Bhopal en India, un caso de corrupción, desinterés y abuso sobre cientos de miles de personas.
En 1984 en Bhopal, India, se produjo una gran tragedia y lo que fue considerado uno de los peores desastres industriales de la historia.
La planta de la empresa Union Carbide tuvo una fuga de un gas altamente tóxico.
Hubo miles de muertos, personas que quedaron con enfermedades crónicas y un nivel de contaminación ambiental que sigue teniendo consecuencias hasta el día de hoy.
Union Carbide Corporation es una empresa de productos químicos de Estados Unidos.
En 1950, con el auge agrícola internacional, esta empresa decidió construir una fábrica de formulación de plaguicidas en India.
Esto se concretó finalmente en 1969 a través de la creación de Union Carbide India Limited.
Su objetivo era producir el pesticida Sevin.
Uno de sus componentes es el MIC, que es isocianato de metilo, un compuesto químico extremadamente tóxico.
En un primer momento, el MIC se importaba desde Estados Unidos y en la fábrica de Bhopal se formulaba el Sevin.
Aunque esto terminó resultando poco conveniente para las ganancias de la empresa.
Por eso, para 1980 comenzaron a fabricar el MIC directamente en Bhopal.
Pero la producción de pesticidas no funcionó como se esperaba.
Debido a las repetidas sequías y a que se fueron dando a conocer los efectos generados por este tipo de productos, enseguida bajaron las ventas.
En 1982 estas representaron menos de la mitad de la capacidad de producción.
Para colmo, para esa época, comenzaron los conflictos en la fábrica.
El 25 de diciembre de 1981 hubo una fuga de fosgeno que mató a un trabajador e hirió gravemente a dos más.
Luego, el 2 de enero otros trabajadores fueron hospitalizados como consecuencia de otra fuga.
Estos hicieron un informe que reveló que existían un total de 61 peligros en las unidades de fosgeno y de isocianato de metilo.
Además, expresaron su preocupación por el mal estado de los equipos de seguridad y por la falta de controles periódicos sobre los sistemas de alarma.
Pese a este llamado de atención, la empresa nunca envió un equipo de seguimiento a Bhopal.
Durante los dos años posteriores continuaron registrándose fugas de manera bastante regular.
De hecho, el periodista Rajkumar Keswani advirtió sobre el peligro que representaba la fábrica de Union Carbide publicando una nota titulada: “¡Despierten gente de Bhopal, están al borde de un volcán!”.
Ese día a las 20:30hs. comenzó una fuga de casi 30 toneladas de isocianato de metilo.
Éste rápidamente se expandió por la ciudad, afectando a todos los que vivían allí.
Asfixia, tos, irritación en los ojos y convulsiones fueron algunos de los primeros efectos que el gas tuvo sobre las personas.
Algunos, incluso, quedaron ciegos.
Hubo quienes intentaron escapar, mientras que otros directamente murieron en las calles.
Las primeras semanas después de la tragedia de Bhopal murieron entre 3,000 y 10,000 personas.
Además, más de 100,000 terminaron con problemas de salud crónicos.
El 7 de diciembre de 1984, Warren Anderson, el entonces presidente de Union Carbide, viajó a Bhopal.
Inmediatamente fue arrestado, acusado de “homicidio culposo con muerte por negligencia”.
Sin embargo, unas horas más tarde fue liberado por haber pagado una fianza de aproximadamente 2,000 dólares.
En marzo de 1985, el gobierno de la India se adjudicó el derecho de ser el único representante de las víctimas con plena autoridad para litigar en su nombre y para resolver sus reclamaciones en el exterior.
Por eso presentó una demanda contra Union Carbide en un tribunal de Nueva York.
Pero este resolvió que no estaba bajo la competencia de un tribunal de Estados Unidos intervenir en este caso.
Durante varios años estuvieron negociando una cifra de reclamaciones.
Inicialmente se le solicitó a Union Carbide una suma de $3,300 millones de dólares.
Pero recién llegaron a un acuerdo en 1989 y por una suma mucho menor: Ese acuerdo además absolvió a la empresa de todas sus responsabilidades civiles y penales.
Aparentemente, solo una pequeña parte de este dinero fue entregado a las víctimas de la tragedia de Bhopal.
Los sentenciaron a dos años de prisión.
Pero poco tiempo después todos fueron puestos en libertad bajo fianza.
Bueno, no fue tan así.
Tanto la investigación realizada por Union Carbide como por el gobierno indio llegaron a la misma conclusión: la causa directa de la fuga del gas fue que grandes cantidades de agua ingresaron a un tanque que contenía isocianato de metilo.
Esto provocó una reacción química que obligó a la válvula de liberación de presión a abrirse y permitió que el gas se filtrara.
Sin embargo, estos difieren sobre la forma en que el agua logró entrar en el tanque.
Una de las hipótesis sostiene que los empleados de limpieza de la fábrica no estaban familiarizados con los procedimientos de mantenimiento ni con los cuidados que se requerían.
Por eso, habrían provocado la filtración del agua al tanque de manera involuntaria.
Ellos sostienen que: “la causa del desastre fue indudablemente un sabotaje.
La evidencia muestra que un empleado de la planta de Bhopal deliberadamente introdujo agua en el tanque de isocianato de metilo”.
Aunque, cabe aclarar, nunca especificaron cuáles eran esas evidencias ni quién era el sospechoso de haber llevado adelante el sabotaje.
Por haber planteado esta teoría la empresa fue acusada de querer posicionarse como una víctima más de la tragedia de Bhopal para desligarse de la responsabilidad de lo ocurrido.
Ellos sostienen que Union Carbide Corporation nunca controló las operaciones diarias de la planta y que, por lo tanto, no es legalmente responsable del desastre.
Así lo explicitan en su sitio web: “las personas que viven cerca de la planta de Bhopal pueden haber sufrido heridas terribles y duraderas por el desastre totalmente evitable del que alguien es responsable.
Sin embargo, después de nueve años de litigio contencioso, toda la evidencia en este caso demuestra que Union Carbide Company no es esa entidad”.
Ellos hablan de que este hecho fue un caso de negligencia corporativa, tanto por parte de Union Carbide Corporation como del gobierno de la India.
Aseguran que Union Carbide, como consecuencia de la baja en las ventas, realizó una fuerte desinversión en la empresa, que se vio reflejada en la poca inversión en seguridad, en un mantenimiento deficiente y en la falta de capacitación de los operadores.
De hecho, afirman que el supuesto sabotaje al que se refiere Union Carbide hubiera sido improbable si los sistemas de seguridad hubieran estado funcionando correctamente.
Otro factor importante por el que reclaman los activistas que investigan la tragedia, es por la contaminación ambiental en Bhopal, India y por los efectos que ésta tiene sobre la población, incluso en la actualidad.
También es probable que la exposición a mezclas de sustancias químicas sintéticas tóxicas y metales pesados graves tengan consecuencias para la salud y la supervivencia de la población local”.
Los activistas denuncian que Union Carbide vendió la planta sin haber limpiado el sitio, y por eso reclaman que Dow Chemical asuma las responsabilidades de la limpieza.
Pero la empresa rechazó la demanda y se negó a aceptar la responsabilidad.
Mientras tanto, en Bhopal hay casos de niños enfermos o con defectos de nacimiento debido a la alta contaminación del lugar.
¿Quién se va a hacer cargo de las consecuencias del peor desastre industrial de la historia?
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